Aquí iré poniendo la historia completa para que se pueda leer del tirón ^^
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PRÓLOGO
Empecé a codearme con gente famosa, y empecé a ganar seguidores. Dejé de salir a la calle y me di de baja en el número de móvil para que no me llamasen. La gente me aclamaba y me suplicaba que les mencionase, pero yo sólo faveaba. Entonces, un día, pasó algo extraño.
Yo estaba en mi casa, twitteando, cuando la cuenta no me iba. Entonces actualicé, y me salió un mensaje que ponía SU CUENTA ESTÁ SUSPENDIDA.
Lloré como un niño pequeño, y en twitter se hizo un movimiento para que me devolvieran la cuenta, pero no fue así. Tras cinco días dando a F5 sin obtener respuesta decidí que era hora de salir a la calle y hacer algo por mi cuenta… de twitter.
Mi propósito: llegar al mundo del Arcoiris, donde habitaban criaturas fantásticas, y sobre todo, estaba el castillo del pajarito azul, es decir, de Twitter, donde podrían devolverme mi cuenta.
Pero para ello tenía que salir a la calle. Y eso conlleva encontrarme con seres extraños, como los canis, los modernos, los emos… Pero yo, por mi cuenta (de twitter) lo iba a hacer.
CAPÍTULO 1
Hoy es el primer
día que salgo a la calle. ¿Habéis estado alguna vez allí? Todo es como... en
3-D, hiperrealista. Terrorífico. Incluso me ha hablado una persona real. He
pasado mucho miedo, la verdad: estaba mirando intrigado una especie de flexo de
tres metros y se me ha acercado una señora de unos 120 años a preguntar no sé
qué de un autobús, así que he hecho lo que cualquiera habría hecho en mi
situación: lanzarle mis excrementos a la cara y correr (lo vi en un cacho de
documental que llegó a trending topic).
No sabéis lo que cansa ponerse a correr. ¡Las calles no terminan! Ahora mismo
estoy recuperándome sentado en la acera mientras me tomo un Red Bull. ¿Sabéis
que aquí fuera hay que pagar por lo que comes?
Se me acaba de sentar un señor al lado. Tiene un bigote de morsa muy gracioso y
no deja de moverlo de un lado para otro. Creo que me he reído en alto, porque
me está mirando. Parece que va a decir algo... @Demonacho.
Me mira intensamente, no puedo evitar volver a reírme.
¡Mierda, me he vuelto ha reír en alto! Creo que eso del twitter me ha afectado
algo. No me ha dado tiempo a hacer nada cuando la boca del señor se abre.
Escucho algo cómo "aaaaaagdeeeeeeeeerriiirrrrrj". Pongo mi cara de
plátano, sí, esa que es una mirada al señor y la boca sonriente pero cerrada, y
pienso "ajá, he entendido todo lo que has dicho"; pero le digo
"¿qué?". Él sigue hablando (si eso se puede llamar
"hablar") y decido que lo mejor que puedo hacer es irme. Me levanto y
echo a correr. Cuando ya estoy a unos 200 metros de distancia, dejo de correr.
Ando mirando al suelo, tengo esa costumbre. De repente, veo un billete. Es un
billete extraño, no son euros, es otra cosa. Pensé "no puedo creer que
hayan cambiado de moneda, y no me haya enterado". Me agacho a recogerlo. Antes
de que pueda atraparlo, me dan una patada en el culo, y me caigo de
frente.... @ireneglez5
Muy bien, ahora estoy de boca en el
suelo y creo que me he roto un diente. Debe ser lo mejor para ser la primera
vez que salgo de casa en mucho tiempo.
Bueno, lo suyo es que siga andando.
La verdad es que tampoco ha cambiado mucho este sitio. Así que creo que no me
perderé. Creo que debo ir al aeropuerto, pero después del golpe estoy atontado
y no sé realmente dónde está la sede de Twitter. Aunque el mundo del Arcoiris puede
ser un buen sitio para empezar.
¡Menudo robo! ¡Cinco euros por el
viaje al aeropuerto! Creo que a la vuelta voy andando. Pero bueno, ya estoy en
el aeropuer… ¡Un vuelo al castillo del pajarito azul por dos cincuenta! ¡Ese
billete es mío, señora!
Y después de un retraso de tres
horas y media (¿qué coj... hacía el piloto?) nos llaman para embarcar.
Por fin embarco hacia mi destino. Ya
solo falta ver si… ¿TRES EUROS UNA COCACOLA? ¡Anda ya!
Bueno, espero que el vuelo no tenga más sobresaltos. Mierda, turbulencias.
Empezamos bien. @Walden_tres
CAPÍTULO 2
Entonces me monto en la silla de ruedas motorizada el viejo mas cercano (había 6) y me dirijo al baño. Necesito defecar.Y las turbulencias le dieron un estilo especial a dicho proceso, digamos que todo parece una batidora de cacotas. @JMTG888
Y sin poderlo evitar, se produjo una pequeña fuga que manchó mi ropa interior. Entonces me levanté con el único objetivo de alcanzar el microscópico váter del avión, haciendo caso omiso de los gritos de la azafata:
—¡Santa Bárbara bendita! ¡No se levante!
Pero era una ardua tarea pues mientras avanzaba por el estrecho pasillo del avión de aerolínea barata, este pegó un tumbo que me lanzó de un lado a otro, hizo que me golpeara la cabeza con un maletero y que le diera un codazo en la nariz a un monje budista, con la mala suerte de que la sangre salpicara a la vieja que tenía al lado y esta empezase a chillar haciendo que el pánico cundiera por el resto de pasajeros. Pero yo seguía con la vista fija en el baño.
Tras varios golpes más conseguí llegar, bloqueé la puerta y me bajé los pantalones.Entonces fue cuando me di cuenta de que lo que yo creía que había sido una pequeña fuga en realidad había sido una auténtica bomba nuclear (¿o nucelar?).@Veeroonica_
La cosa se complicaba...y cuando digo la cosa me refiero a "eso" que estaba creciendo dentro de mi y luchaba por escapar de mis entrañas con todo lo que conllevaría. Incluido fluidos.
Me até a las tuberías como pude. Si me iba a transformar que por lo menos apareciera en la misma habitación donde iba a perder la conciencia. Notaba como la energía corría dentro de mi, intentaba escapar por la punta de mis extremidades y entonces...entonces apareció ella.
Ella, que jugaba a desatar mi instinto más animal cuando estábamos solos; ser osito de peluche con ella y otras fieras varias. Ahora aparecía cuando menos la necesita para estallar. La viagra ya había funcionado. @LauraRve (Y esto es la parte moñas de “Cómo conocí a vuestro padre”)
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